La magia en la cultura occidental es una categoría en la que se han colocado diversas creencias y prácticas que se consideran separadas tanto de la religión como de la ciencia.
Históricamente, el término tenía connotaciones despreciativa, y los acontecimientos encasillados como mágicos se percibían como primitivos, extranjeros y de otra dimensión o mundo. El concepto desde lo académico, se ha incorporado en el estudio de la religión y las ciencias sociales, proponiendo definiciones diferentes. Este concepto ha sido considerado complejo de dilucidar por lo que muchas veces se ha considerado que es mejor no abordarlo.
El término magia deriva del antiguo persu magu, una palabra que se aplica a una especie de agente religioso sobre el que se conoce poco. A finales del siglo VI antes de Cristo, este término se adoptó del griego antiguo, donde se usaba con connotaciones negativas, para aplicar a los ritos religiosos que se consideraban fraudulentos, no convencionales y peligrosos.
Este significado del término fue luego adoptado por el latín en el primer siglo aC. A través del latín, el concepto se incorporó a la teología cristiana durante el siglo I d. C., donde la magia se asoció con los demonios y, por lo tanto, se definió contra la religión cristiana.
Este concepto fue generalizado a lo largo de la Edad Media, cuando los autores cristianos lo calificaron y asociaron con una amplia variedad de prácticas, como encantamientos, brujería, conjuros, adivinación, nigromancia y astrología.
En la Europa moderna temprana, los humanistas italianos reinterpretaron el término en un sentido positivo para crear la idea de la magia natural. Tanto las interpretaciones negativas como las positivas del término se conservaron en la cultura occidental durante los siglos siguientes, y el primero influyó en gran medida en los primeros usos académicos de la palabra.
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¿Qué es la magia?
Los conceptos de magia generalmente sirven para demarcar claramente ciertas prácticas de otras similares en una sociedad dada. Según Bailey, en muchas culturas y en varios períodos históricos, las categorías de la magia a menudo definen y mantienen los límites de las acciones social y culturalmente aceptables con respecto a las entidades o fuerzas numínicas u ocultas.
Dentro de la cultura occidental, el término “magia” se ha relacionado con ideas del Otro, extrañeza, y primitivismo. En palabras de Styers, se ha convertido en un poderoso marcador de diferencia cultural.
También se ha presentado repetidamente como un fenómeno no moderno. Entre los intelectuales occidentales a fines del siglo XIX y principios del XX, la magia era vista como una característica definitoria de las mentalidades primitivas y comúnmente se atribuía a grupos marginales, ubicaciones y períodos.
¿Qué tipo de magia existe?
Definir los distintos tipos de magia es tan complicado como definir la magia misma. No toda la magia tiene la misma intención y cada practicante de magia utiliza diferentes enfoques.
En el uso común, la magia evoca algún tipo de cambio en el mundo físico a través de medios no científicos. En los círculos ocultos y esotéricos, la “magia” puede tomar un significado más amplio que involucra el cambio espiritual. Los practicantes de algunas ramas consideran que sus prácticas tienen muy poco en común con otras ramas.
Magia blanca
La magia blanca y negra son términos imprecisos. En términos generales, se utilizan para diferenciar la magia que no es socialmente aceptable en comparación con la magia que es.
Hoy en día, se hace más bien una diferencia entre la magia que daña y la magia que no lo hace. Sin embargo, existen muchas prácticas con las que diferentes personas no están de acuerdo, como la adivinación, el daño justificado, la magia del amor, entre otros. Para conocer todo sobre la magia blanca y su energía.
Magia negra
La magia negra se refiere tradicionalmente al uso de poderes sobrenaturales o magia para el mal. Los conceptos relacionados con la magia negra son descritos, incluso de manera inexacta, como una característica habitual de los libros, películas y otras culturas populares.
No hay seguridad de que la magia negra haya matado realmente a alguien. Se sospecha que es más un reclamo exagerado hecho por un profesional que una amenaza, considerándose más bien, una fabricación principalmente psicológica.
Esto es común para el vudú, y tal vez algunas otras magias “ocultas”. Se puede respaldar con el uso de una variedad de venenos o medicamentos de contacto, también, medicamentos regulares mezclados con solventes de contacto.
Estos se otorga al “maldito” al recubrir objetos cotidianos manejados únicamente por éste, de modo que nunca sepa que fueron envenenados o dopados para ver y sentir cosas extrañas. Para ir a fondo en el tema de magia negra.
Magia Elemental
Los elementos base de esta magia son el aire, el agua, el fuego, la tierra, la luz y la oscuridad. Estos elementos fueron usados en la antigua Grecia incluyendo el fuego y el éter, con la finalidad de explicar la naturaleza y complejidad de la materia en términos de sustancias más simples.
Estos elementos se cree que fueron usados por culturas tan antiguas como la babilónica, la japonesa, tibetana e india, teniendo en sus propios idiomas nombres para cada elemento. describiéndolos más como energías o transiciones en lugar de tipos de materiales.
Los elementos se asociaban con partículas tales como los átomos para referirse a porciones muy pequeñas e indivisibles de la materia. No obstante, se daban también interpretaciones a los elementos como divisibles en piezas infinitamente pequeñas pero sin cambiar su naturaleza.
El alquimista puede crear, moldear y manipular los elementos básicos de la naturaleza, sus partes y principios rudimentarios, para hacerlos más simples o esenciales de los que consiste la naturaleza.
También en este contexto, se da el caso de el mago elemental puede crear, moldear y manipular elementos como el Aether, el cual es considerado un “Elemento celeste” poderoso y único que fluye a través del cosmos.
Por lo tanto, se cree que el éter conforma un plano de transición entre el mundo físico y la energía. Sin embargo, aunque puede participar en la naturaleza de cualquiera de las dos sustancias, el éter no es ninguno de estos elementos.
Seguidamente se da un resumen de la magia de los elementos con cada uno de ellos:
La Magia del elemento fuego
Este elemento se usa como protección, concentrándose en la intención. También se puede usar como elemento purificador de las energías negativas. Igualmente, se pueden quemar pertenencias que hayan causado dolor.
En este sentido, el fuego puede ser usado como potenciador de la energía, vinculado a la energía del sol. Lo que permite crear y construir impulsando la fuerza de la creatividad.
La Magia del elemento agua
La magia de este elemento actúa sobre las emociones. Por ello, se recomienda trabajar con este elemento cuando se están viviendo momentos delicados y difíciles para recuperar progresivamente el equilibrio.
La Magia del elemento Aire
Este elemento es considerado muy dinámico y muy creativo. Asociándose directamente con el mundo de las ideas. Por ello, cuando se están pasando momentos de estancamiento con las ideas, se invoca el elemento aire para que desbloquee la mente y se recupere el flujo de la creatividad.
La Magia del elemento Tierra
Desde la tierra como elemento se puede hacer contacto directo con el planeta considerándolo un ser vivo. Por ello, potencia los rituales de crecimiento y protección actuando como un elemento de balance de la energía.
La Magia del elemento Luz
La luz es utilizada por los magos como una forma de ataque y defensa. Por lo tanto su magia es capaz de lanzar ilusiones para cambiar la apariencia o implantar una imagen en la mente. También, se puede utilizar como una barrera de protección.
Magia de tiempo
En este caso, el usuario puede realizar y lanzar una rara variedad de hechizos y dotes mágicos que manipulan el tiempo hasta cierto punto.
Con este tipo de magia el tiempo gira en torno a la aceleración, desaceleración, detención e incluso rebobinado o bucle. El rango del área afectada es proporcional al dominio del usuario, ya que los niveles superiores pueden afectar todo el espacio y la continuidad del tiempo.
Dado que el tiempo existe y fluye dentro del espacio, los dos están interrelacionados, y al manipular el tiempo, se distorsiona el espacio proporcionalmente. Los efectos de la distorsión relativa del tiempo, pueden variar por ejemplo, con el control del tiempo de un simple objeto o persona, que puede no afectar el espacio en el que residen pero, al torcer el flujo de tiempo de una región del espacio puede hacer que el área se deforme. Debido a que el tiempo existente en un espacio, su manipulación no puede afectar a otra dimensión.
Advertencias sobre usar la magia, las sombras están ahí
En el campo de la magia pueden ocurrir cosas buenas y malas cuando se adentran las personas en este campo. No se trata de asustar a quienes la usan pero, se busca dar la información suficiente para que puedan tomar una decisión informada.
En el llamado mundo invisible que es paralelo a las criaturas vivientes del mundo físico, estas criaturas carecen de forma física y se alimentan de la energía en lugar de la materia.
Estos entes pueden ser tan variados como la vida animal en el mundo físico. Varían en tamaño (potencia) desde los equivalentes a los insectos y roedores hasta los queson equivalentes al ser humano entrenados por arte de la magia, y más allá de los Grandes Antiguos.
La mayoría de estos entes se encuentran en los campos de energía aleatorios que se filtran de los humanos y otras criaturas en este mundo. Algunos otros, sin embargo, pueden ser un poco más siniestros, que son las llamadas sombras.
Las sombras están catalogadas en tres variedades básicas. Las pequeñas que se alimentan de la energía de las emociones negativas. Por lo que, si está emitiendo una fuerte negatividad, serán atraídos a usted. Existen formas de saber si estas siendo victima de brujería o de alguna sombra.
Si no está protegido mágicamente, se cuelgan al campo de energía (aura). Por lo general, no son mucho más molestas que las sanguijuelas o los mosquitos. Sin embargo, mil sanguijuelas podrían debilitar a una persona severamente. Aprenda hechizos de protección.
La magia es una forma de arte. A pesar de los mejores esfuerzos de los magos, los rituales y tecnopaganos, la magia sigue siendo tan impredecible y poderosa como el clima a menos que se esté altamente capacitado y concentrado.
La magia responde de manera muy similar a la inestabilidad climática, ya que, cada acción que se realiza mágica o mundana, tiene consecuencias que se extienden como las ondas en un estanque.
Entonces, antes de hacer magia hay que estar muy seguro de las consecuencias. Pregúntese si el hechizo se vuelve contra usted y le afecta en lugar del objetivo previsto, ¿puedo vivir con el resultado? Por lo tanto, usar la magia debe ser solo en extrema necesidad, y la causa debe ser justa.
Origen e Historia de la magia
Básicamente, el termino se utiliza para delinear espacios de creencias apropiadas. En ello, es importante dibujar distinciones en el ejercicio del poder. De manera similar, el estudioso de la religión Randall Styers señala que intentar definir la magia representa un acto de demarcación por el cual se yuxtapone contra otras prácticas sociales y modos de conocimiento como la religión y la ciencia.
El concepto y el término magia se desarrolló en la sociedad europea y, por lo tanto, usarlo cuando se habla de culturas no occidentales o formas pre-modernas de la sociedad occidental plantea problemas, ya que puede imponer categorías occidentales que les son ajenas.
Mientras que la magia sigue siendo un término asociado con la historia de las sociedades occidentales, es también un término del campo de la ética cuando se aplica a sociedades no occidentales.
Durante el siglo XX, muchos estudiosos de las sociedades asiáticas y africanas rechazaron el término magia, así como conceptos relacionados como brujería, en favor de los términos y conceptos más precisos que existen dentro de estas sociedades específicas.
Muchos eruditos que estudian las sociedades premodernas de Europa han adoptado un enfoque similar como la antigüedad clásica, que considera inapropiado el concepto moderno de “magia” y favorece términos más específicos que se originan en el marco de las culturas antiguas que estudian.
De manera alternativa, el término implica que todas las categorías de magia son etnocéntricas y que tales concepciones occidentales son un componente inevitable de la investigación académica.Muchos académicos han argumentado que el uso del término como una herramienta analítica debe ser rechazado por completo. El erudito de la religión Jonathan Z. Smith, por ejemplo, argumentó que no tenía utilidad como un término ético que los estudiosos deberían usar.
El historiador de la religión Wouter Hanegraaff estuvo de acuerdo, al afirmar que el término magia es un objeto importante de investigación histórica, pero que no está pensado para hacer investigación.
Bailey observó que, a principios del siglo XXI, pocos estudiosos buscan grandes definiciones de magia, pero en su lugar centran su atención en los contextos particulares, examinando lo que significa el término magia para una sociedad determinada. Este enfoque, según este autor, cuestiona la legitimidad de la magia como una categoría universal.
Libros prohibidos
A lo largo del tiempo se tiene conocimiento de que existen libros de magia de diversos tipos. No obstante, se puede decir que los libros que son sobre magia negra, son los que se consideran por muchas religiones y filosofías como prohibidos.
Debido a que hablan de rituales, conjuros o prácticas malignas en el mundo de la magia, los expertos afirman que son mucho más poderosas que la magia blanca pero tienen como particularidad que quién la practica, va manchando poco a poco su vida y su alma.
Es decir que, en poco tiempo, la persona se puede convertir en un hechicero maligno capaz de comprometer su alma para conseguir los objetivos. Muchos de estos libros son considerados tenebrosos o no aptos para que cualquiera los lea.
Así, los libros de magia considerados prohibidos fueron catalogados de esta manera, porque la iglesia católica los considera “malditos”. Por lo que, cualquiera que los lea puede tener la tentación de seguir investigando o practicar la hechicería (magia negra) que se encuentra escrita en estos libros.
Usos buenos y malos de la magia
Cuando se habla de magia, se está hablando de aspectos que tienen un código de base de aplicación detrás del escenario. Las brujas, los brujos y los chamanes alguna vez tuvieron una función importante en la sociedad.
Tienen que saber qué plantas y hierbas usar en la curación, pero lo más importante era que tenían que saber cómo hacer una buena representación para que sus pacientes creyeran que podían y mejorarían su salud, de allí surgió el efecto placebo.
Estos practicantes tenían que hacer que la gente creyera en ellos para ayudar a las personas a sanar. Convencían a sus pacientes y clientes de que tenían poderes especiales, estaban en sintonía con los espíritus y, a través de diversos hechizos y encantamientos, podían apaciguar a esos espíritus para que cumplieran sus órdenes.
No todos ellos estaban haciendo esto con la intención de engañar a sus clientes. Quién mejor para ser convincente que alguien que realmente se lo creía. Estos practicantes tenían mucho poder e influencia en las comunidades.
Cuando la iglesia se extendió por la Europa pagana y envió misioneros a través de África y el nuevo mundo, estos practicantes fueron literalmente una competencia.
Los sacerdotes y misioneros se declararon a sí mismos como representantes del único dios verdadero y, literalmente, demonizaron a los wiccanos, a los chamanes y a todos los demás practicantes de la “magia”, declarando que cualquier poder que pretendían provenir del gran engañador, Satanás, era irónico.
Los wiccanos nunca creyeron y aún no creen en Satanás. Fue la iglesia cristiana la que dio origen al satanismo. Los practicantes de la “magia” en realidad evitaron tratar con y trataron de derrotar a los espíritus inmundos.
Todavía existen los Wiccanos y otros practicantes en la sociedad hoy, no fueron eliminados por completo. Ahora, gracias al aumento del satanismo, también se tienen practicantes de “magia negra” destinados a aumentar su propio poder y hacer daño. Estos son el polo opuesto de los wiccanos. Sin embargo, algunas iglesias los agrupan a todos.
También hay algunos habladores que se aprovechan de las personas haciéndoles lecturas psíquicas y supuestas curaciones basadas en la fe. Este tipo de personas no creen en nada, sino buscan manipular las necesidades de las personas. La religión cristiana tiene parte del mismo tipo de personas. Algunos predicadores religiosos y curanderos de fe usan los nombres de Dios y Cristo para engañar a otros con su supuesta magia y milagros.
Todos estos actos practicados buscan influir en la mente y el ideario de las personas, haciéndoles creer que sus vidas y salud pueden cambiar por obra y gracia de otros que se dicen iluminados.