¿Qué es el truco mágico con el 9? La matemática que impresiona a todos
nov, 19 2025
¿Alguna vez has visto a alguien hacer un truco con números y pensar: ¡Eso no puede ser casualidad!? Hay un truco con el número 9 que funciona una y otra vez, sin necesidad de cartas, varitas ni espejos. Solo necesitas un papel, un lápiz y alguien que quiera jugar. Y lo más loco: no es magia. Es matemática. Pero tan perfectamente diseñada que parece magia.
El truco del 9: cómo funciona
Te pido que pienses en un número de dos dígitos. Cualquiera. No lo digas. Ahora, suma esos dos dígitos. Por ejemplo, si pensaste en 47, sumas 4 + 7 = 11. Luego, resta ese resultado del número original: 47 - 11 = 36. Ahora, suma los dígitos del resultado: 3 + 6 = 9. Siempre da 9.
Prueba con otro: 82. 8 + 2 = 10. 82 - 10 = 72. 7 + 2 = 9. Otra vez 9. ¿Y si eliges 15? 1 + 5 = 6. 15 - 6 = 9. ¡Directo al punto!
Esto no es suerte. Es una propiedad matemática de los números en base 10. Cualquier número de dos dígitos, cuando le restas la suma de sus dígitos, siempre da un múltiplo de 9. Y la suma de los dígitos de cualquier múltiplo de 9 siempre es 9 (o 18, 27, etc., pero si sigues sumando hasta que quede un solo dígito, siempre terminas en 9).
Por qué funciona (y por qué parece magia)
Imagina que tienes un número como 53. En realidad, ese número es 5 × 10 + 3 × 1. Cuando sumas los dígitos (5 + 3), estás sumando 5 × 1 + 3 × 1. Al restar, haces: (5 × 10 + 3 × 1) - (5 × 1 + 3 × 1) = 5 × 9 + 3 × 0 = 45. Y 45 es 5 × 9. Así que siempre terminas con un múltiplo de 9.
El truco funciona porque el sistema decimal está diseñado así. Cada vez que multiplicas un dígito por 10, estás añadiendo 9 veces ese dígito extra. Eso es lo que hace que el resultado siempre se deslice hacia el 9. No es magia. Es lógica. Pero cuando lo ves por primera vez, tu cerebro no lo entiende. Y eso es lo que lo hace perfecto para impresionar.
Cómo presentarlo como un truco de magia real
Para que parezca verdadera magia, no digas nada de matemáticas. Solo hazlo como un ritual. Pídele a alguien que piense en un número de dos dígitos. Dile que sume los dígitos. Que reste ese total del número original. Que sume los dígitos del resultado. Y luego, con una pausa dramática, di: “El resultado es 9, ¿verdad?”.
La mayoría de las personas no lo verán venir. Incluso si lo intentan con 99: 9 + 9 = 18. 99 - 18 = 81. 8 + 1 = 9. Sigue funcionando. O con 10: 1 + 0 = 1. 10 - 1 = 9. ¡Directo!
Puedes hacerlo con más números. Pídele que lo haga tres veces. Que lo pruebe con un amigo. Que lo intente con un número de tres dígitos. Por ejemplo: 347. 3 + 4 + 7 = 14. 347 - 14 = 333. 3 + 3 + 3 = 9. Sigue siendo 9.
El truco extendido: el número mágico que nunca falla
Una variante aún más poderosa es pedirle a alguien que escriba cualquier número de cuatro dígitos, luego que lo revuelva (cambie el orden de los dígitos) y reste el menor del mayor. Por ejemplo: 7521 y 1257. Restas: 7521 - 1257 = 6264. Ahora suma los dígitos: 6 + 2 + 6 + 4 = 18. Luego suma 1 + 8 = 9. Otra vez 9.
Funciona porque al reordenar los dígitos, no cambias la suma de los dígitos. Y la diferencia entre dos números con los mismos dígitos siempre es múltiplo de 9. Es una propiedad matemática conocida desde hace siglos, pero pocos la conectan con la magia.
¿Por qué este truco es tan popular entre los magos?
Porque no requiere práctica. No necesitas aprender a manejar cartas, ni a hacer palmas, ni a engañar con la vista. Solo necesitas entender una regla simple. Y eso lo hace perfecto para principiantes. También es imposible de descubrir si no sabes matemáticas. Nadie espera que un truco de números tenga una explicación lógica. Siempre asumen que hay un truco de manos o un espejo.
Además, es portátil. Lo puedes hacer en una cafetería, en un avión, en una fiesta. No necesitas material. Solo un papel, un lápiz, y alguien que quiera participar. Y cuando lo haces bien, la reacción es siempre la misma: sorpresa, risa, y luego: “¿Cómo lo hiciste?”.
Errores comunes y cómo evitarlos
La mayoría de los errores vienen cuando alguien elige un número con ceros o un solo dígito. Si alguien elige 5, no funciona. Porque necesitas dos dígitos. Si elige 100, también puede confundir. Asegúrate de decir claramente: “Piensa en un número de dos dígitos, entre 10 y 99”.
Otro error: no pedir que sumen los dígitos del resultado final. Si alguien hace 47 - 11 = 36 y se detiene ahí, no verás el 9. Siempre debes decir: “Ahora suma los dígitos del resultado”. Si lo haces bien, el truco nunca falla.
¿Qué pasa si el resultado es 18 o 27?
Si alguien elige un número grande, como 98: 9 + 8 = 17. 98 - 17 = 81. 8 + 1 = 9. Funciona. Pero si elige 99: 9 + 9 = 18. 99 - 18 = 81. 8 + 1 = 9. Siempre terminas en 9. Incluso si el primer resultado es 18, 27, o 36, la suma de sus dígitos siempre reduce a 9. Eso es clave. No te detengas en 18. Sigue sumando hasta que quede un solo dígito.
El truco en la vida real: más que un juego
Este truco no es solo para divertir. Es una puerta de entrada a entender cómo funcionan las matemáticas en la vida cotidiana. Muchas personas odian las matemáticas porque las ven como algo abstracto. Pero cuando ven que un número como el 9 aparece una y otra vez, sin importar qué hagan, empiezan a verlas de otra manera. Es como descubrir un patrón oculto en el mundo.
En las escuelas, profesores lo usan para enseñar divisibilidad. En las fiestas, lo usan para romper el hielo. En los shows de magia, lo usan para construir confianza antes de pasar a trucos más complejos. Es el truco perfecto para empezar.
¿Por qué el 9 y no otro número?
El 9 es especial porque es uno menos que 10, y nuestro sistema numérico se basa en 10. En base 8, el número mágico sería el 7. En base 12, sería el 11. Pero como vivimos en un mundo de dedos (10), el 9 es el que gana. Es el único número que tiene esta propiedad en nuestro sistema. Y eso lo hace único.
No hay otro número que funcione así. El 8 no lo hace. El 7 no lo hace. El 5 tampoco. Solo el 9. Y por eso, cuando lo ves, sabes que algo especial está pasando.
Practícalo. Y luego enséñalo.
Prueba este truco con cinco personas esta semana. No importa si lo entiendes o no. Solo hazlo. Mira sus caras cuando digas: “El resultado es 9”. Esa expresión de asombro es lo que hace que la magia sea real. No necesitas un sombrero. No necesitas una varita. Solo necesitas un número, una regla, y el valor de mostrarle a alguien que el mundo tiene secretos… y que a veces, esos secretos son matemáticos.
¿Por qué siempre da 9 en este truco?
Porque cualquier número de dos o más dígitos, cuando le restas la suma de sus dígitos, siempre produce un múltiplo de 9. Y la suma de los dígitos de cualquier múltiplo de 9 siempre se reduce a 9. No es magia: es matemática del sistema decimal.
¿Funciona con números de tres o cuatro dígitos?
Sí. Funciona con cualquier número entero. Por ejemplo, con 347: 3 + 4 + 7 = 14. 347 - 14 = 333. 3 + 3 + 3 = 9. Incluso si el resultado es 18, 27 o 36, sumas sus dígitos hasta que quede uno: 1 + 8 = 9, 2 + 7 = 9, etc.
¿Puedo hacer este truco sin papel y lápiz?
Sí, pero solo si el número es pequeño. Para números como 47 o 82, puedes hacer la suma mentalmente. Para números más grandes, como 7521, es mejor usar papel. La mayoría de las personas no confiarán en tu memoria si no ves lo que escriben.
¿Qué pasa si alguien elige 9?
Si elige 9, no funciona porque es un solo dígito. El truco requiere al menos dos dígitos. Di claramente: “Piensa en un número entre 10 y 99”. Así evitas confusiones.
¿Este truco tiene algún nombre oficial?
No tiene un nombre único, pero en matemáticas se conoce como la propiedad de divisibilidad por 9. En magia, lo llaman el “Truco del 9”, “La constante mágica” o “El número que nunca falla”.
