Las predicciones mediante el horóscopo

¿Qué es el horóscopo?

En el área de la astrología, el horóscopo es un mecanismo en el que es posible llegar a producir una predicción la cual se basa en la posición específica de los astros justo en la fecha del nacimiento. Aunque en la actualidad no se han hallado pruebas de carácter científico que validen la solidez y la veracidad de las predicciones que son obtenidas mediante el horóscopo y su práctica, una cantidad importante de personas refleja y evidencia que estas predicciones han sido eficaces, esto sólo con el uso de testimonios. El horóscopo es una de las numerosas prácticas que se hallan dentro del esoterismo.

Lo cierto, es que algunas personas basan la creencia y la validez de los argumentos por parte de las predicciones mediante esta práctica porque, se deben a fenómenos psicológicos, lo que se deriva de una búsqueda de patrones que se realiza de forma automática en el cerebro. Esto puede verse en la medida en que es posible recordar cosas de forma sencilla las situaciones de coincidencia y en esta medida olvidamos algunos factores de la conciencia.

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¿Cómo se interpreta y funciona el horóscopo?

Para conocer cómo es el funcionamiento de las predicciones mediante la práctica del horóscopo, debemos saber previamente que éste, comprende una representación gráfica, principalmente, de la posición de los astros y planetas en un momento en específico. Este momento al que nos referimos, radica en su posición cuando nace una persona, aunque otras situaciones pueden estar relacionadas con la iniciación a algún proyecto empresarial, una ceremonia relevante, el inicio de un viaje, etc.

La representación gráfica usa diferentes cálculos astronómicos y matemáticos que, para entrar en una categoría, deben coincidir en las fechas de nacimiento en un nivel, sin importar la persona que lo esté realizando siempre y cuando, posibilite la misma información básica y original. Para poder realizar una interpretación del horóscopo, es necesario observar desde la astrología, enfocados en su punto de vista de carácter subjetivo, en el que las reglas para poder interpretar pueden tener algunas modificaciones, esto dependerá de la experiencia de quien lo esté ejecutando como el astrólogo y la formación que éste haya tenido.

Lo que necesitamos para proceder a realizar el horóscopo, serán datos como la fecha exacta, la hora, y el lugar del nacimiento de la persona. En cuanto a la continuación del proceso, también es necesario conocer las posiciones planetarias y otros cuerpos celestes presentes en el universo, las cuales podrán visualizarse mediante la teoría geocéntrica, que sostiene que la ubicación de la tierra corresponde al centro del universo y que los demás astros, incluido el sol, giran alrededor de ella.

La tradición de la lectura del horóscopo

Ciertamente esta tradición no es reciente, pues es procedente de varios conjuntos de creencias en la antigüedad, que en su momento dieron plena veracidad y credibilidad por diferentes culturas y tradiciones que la acogieron. Hasta el día de hoy, hay un gran número de personas que acogen las interpretaciones e influencias de los astros según el signo al que pertenecen.

Cuando la tradición estaba en su momento más fuerte y la esencia de ello que aún se mantiene, es que se creía que la posición y con ella el movimiento que realizaban los diferentes cuerpos celestes, eran capaces de predecir acontecimientos en el futuro, además de poder identificar la personalidad de un individuo. Sin embargo, las suposiciones que sostienen la práctica de la interpretación del horóscopo han sido fuertemente refutadas por diversas divulgaciones y manifestaciones por parte de científicos.

La tradición de la creación de horóscopos proviene sobre todo de las creencias de la historia antigua. Por aquel entonces se creía que la posición y movimiento de los cuerpos celestes podían predecir futuros acontecimientos o el desarrollo de la personalidad de un ser humano. Por el contrario, estas suposiciones han sido refutadas en numerosas publicaciones científicas. Por esta razón, horóscopos y la práctica general de su composición así como la astrología misma, están asignados al Esoterismo.

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